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¿Cuál es la calificación energética de tu vivienda?

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¿Tienes intención de alquilar un domicilio y quieres ahorrar en tu factura de la luz? Para ello deberás conocer cuál es su calificación energética y comparar entre las viviendas escogidas.

¿Qué es la calificación energética?

Se trata de una medida que calcula el consumo anual de energía necesario para satisfacer la demanda energética de un inmueble en condiciones normales de ocupación y funcionamiento, incluyendo la calefacción, iluminación, producción de agua caliente, refrigeración y ventilación.

El 13 de abril de 2013 se publicó el Real Decreto 235/2013 de 5 de abril, por el que se aprueba el procedimiento básico para la certificación energética de los edificios, obligando a toda vivienda en venta o en alquiler a disponer de un Certificado de eficiencia energética.

Puede ser utilizada tanto en viviendas nuevas como ya existentes. Si se trata de una vivienda nueva permite a los compradores comparar la eficiencia energética de los inmuebles que están entre sus opciones, denominada Calificación de proyecto. Así, una vez transcurrido un año se realiza una auditoria energética a fin de conocer el consumo real de energía y otorgar el Certificado energético definitivo.

Por el contrario si se trata de una vivienda ya existente podrán utilizar el informe para determinar las formas más eficientes en los que se puede mejorar la eficiencia energética.

Se determina a través de un Certificado de eficiencia así como una Etiqueta de eficiencia energética emitido por un técnico competente y con una validez máxima de 10 años a contar desde la fecha de su emisión.    

Escala de calificación energética

La escala de calificación energética es de siete letras y varía entre las letras A (edificio más eficiente, consume hasta un 90% menos de energía que una que está catalogada con el nivel más bajo) una de clase B (consume hasta un 70% menos de energía) y una de clase C (consume hasta un 35% menos de energía) hasta llegar al tipo de vivienda G (edificio menos eficiente energéticamente).

Calificación energética

A modo de ejemplo, significa que se podría estimar para una vivienda tipo con un consumo medio de 50 €/mes, supondría que:

  • A++: Consumo de energía inferior al 30% de la media. Gastaría menos de la media con un importe de 15€.
  • A+: Consumo de energía entre el 30% y el 42% de la media. Gastaría menos de la media con un importe de 15€ a 21€.
  • A: Consumo de energía entre el 42% y el 55% de la media. Gastaría menos de la media con un importe de 21€ a 27,50€
  • B: Consumo entre el 55% y el 75% de la media. Gastaría menos de la media con un importe de 27,50€ a 37,50€.
  • C: Consumo entre el 75% y el 90% de la media. Gastaría menos de la media con un importe de  37,50€ a 45€.
  • D: Consumo entre el 90% y el 100% de la media. Gastaría la media con un importe de 45€ a 50€.
  • E: Consumo entre el 100% y el 110% de la media. Gastaría la media con un importe de 50€ a 55€.
  • F: Consumo entre el 110% y el 125% de la media. Gastaría más que la media con un importe de 55€ a 60€.
  • G: Consumo superior al 125% de la media. Gastaría más que la media con un importe mínimo de 62,50€.

Debe tenerse en cuenta que el ejemplo antes mencionado se trata de una ponderación estimada del coste final según la calificación energética.

Y por último, si lo que deseas es mejorar tu calificación energética será a través de una serie de cambios como el aislamiento térmico mediante un doble acristalamiento en las ventanas así como colocación de persianas o toldos. Así como renovando tus electrodomésticos y bombillas a los de clase A. Dicha mejora se verá a la larga en tus facturas de la luz. 

#Luz #Consumo